Cuando un museo muere, o anuncia su muerte, no solo muere parte de la Cultura, de la oferta cultural o de la oferta turística que sirve de atracción a un lugar, sino que muere una parte de la memoria colectiva.
Y ese es el caso de los Museos de Terque si no se evita que cierre sus puertas porque con ello morirá la memoria de las pequeñas cosas, de la gente de los pueblos de Almería y de la Alpujarra. Los Museos de Terque son el vivo ejemplo de lo que Unamuno calificaba como “intrahistoria”, porque la Historia no sólo la hacen los grandes personajes, o no son sólo los grandes hechos históricos, la Historia la hacen las personas de los pueblos en su día a día.
Los 23 años de trayectoria de los Museos de Terque no se pueden echar por la borda por falta de financiación y de un proyecto cultural que aúne los museos provinciales. Los Museos de Terque no son solo un referente a nivel nacional o internacional por el esmero y cariño con los que hacen las cosas, son un campo de investigación para historiadores y antropólogos.
Lo de los Museos de Terque ha sido la “crónica de una muerte anunciada”. El compromiso de la Diputación de Almería no sólo ha de ser verbal, debe de ir acompañado de hechos. En el caso de los Museos de Terque es donde se ve la gran labor que deben ejercer las diputaciones con los pequeños pueblos con sus grandes dificultades y problemas, y no caigan en el olvido primero y en la despoblación después.
Los Museos de Terque
Enlace para ir a la Visita de Athenaa a los Museos de Terque el pasado 16 de diciembre de 2023.